Cuando una relación de amistad se convierte en algo más que nos puede facilitar o complicar la vida hay que tomar decisiones.
Reflexiones: ¡Ups! Me enamoré de mi mejor amiga
Qué dilema tan terrible, ella es tu amiga del alma, tu compañera en miles de aventuras, es una mujer maravillosa, inteligente, simpática, alegre, con sentido del humor, el sueño de cualquiera y por supuesto es tu ideal de amor, pero, existe un pequeño detalle: ¡es tu mejor amiga!
Sí que es tremenda esta situación, ¿qué se hace en este caso?, ¿sigues siendo la confidente de la mujer que amas, escucharás sus relatos amorosos con otras? ¿Apretarás el corazón y no dejarás salir tus emociones para no ser descubierta y es más, le darás el mejor de los consejos para que conquiste a otra mujer o te armarás de valor y le confesarás a tu amiga que ya no la puedes ver como tal sino como el amor de tu vida? ¡uf!...difícil decisión.
Cristina es una amiga que me escribió contándome esta situación -que por otro lado no me ha sido ajena en mi propia vida-. Ella dice que no sabe cómo pasaron las cosas, pero que de repente se dio cuenta de que se había enamorado de su amiga y que ahora sufre tremendamente cada vez que ella le cuenta de sus amores, pero también le duele pensar que si se lo confiesa la perderá como amiga y como posible novia y todo esto le hace sentir la más fea y triste del universo.
Es cierto, la decisión es difícil pero todo es cuestión de poner las cosas sobre la balanza y ver qué te conviene más.
Lo primero y lo que le aconsejó su hermana mayor es no ver la vida tan fatalista, no todo es negro y no se trata de tirarte al suelo para que te levanten. Hay que ser optimista y decretar siempre en positivo para que atraigas buena vibraciones y no te hundas en el pesimismo que sólo te traerá tristeza y créeme con ella no se conquista a nadie.
Ahora bien, pregúntate ¿qué te duele más, verla con otras sin darte la oportunidad de luchar por ella o poner manos a la obra? Posiblemente si tomas la segunda opción y las cosas no resultan como esperas, la relación ya no será la misma, pero, hablando honestamente desde ahora no es lo mismo y lo peor es que tú estás sufriendo.
¿No es más sano tomar al toro por los cuernos, como dice su hermana y hablar honestamente?, con esto tienes dos posibles escenarios: que tu amiga no te vea como novia y se aleje o bien en el mejor de los casos que ella sienta lo mismo y empiecen una nueva relación de amor.
Ahora bien, si ella se aleja seguramente sufrirás horrores, pero el tiempo te dará la oportunidad de que llegue alguien que ahora no ves por estar deslumbrada con tu mejor amiga. Además, siendo honestos, ¿para qué quieres ser testigo de como otras disfrutan del mujer que amas? Mejor lejos y que cada quien haga su vida. Las abuelitas decían: Más vale una colorada y no 100 descoloridas, ¿entiendes? Lo mejor es ser honesta primero contigo y luego con ella. Deja de sufrir y lucha por lo que quieres, es mejor decir me acuerdo y no me imagino. Si tu amiga no siente lo mismo por lo menos no tendrás que fingir que no te afecta el verla con otra, ya no te lastimes más, que esa relación te hace más daño a ti que a ella.
Tú tienes la última palabra.
Tú tienes la última palabra.