SUEÑO:LOS TALISMANES BRILLANTES

Sueño que tuve hace unos meses,que escribí al despertarme y que de alguna me ha aportado luz sobre mi mismo y mi búsqueda personal. La interpretación es complicada de expresar y sobre todo intima,pero el sueño me pareció lo suficientemente bello como para compartirlo.

¿Soy un niño de unos siete años? Estoy en el salón de la antigua casa de mis padres, allí donde me crié. Aunque no es exactamente igual lo identifico por el sofá rinconera dorado. Hay mucha gente sentada y en salón en general. No reconozco a nadie pero tengo la sensación de que son de países del este por la forma de hablar y por los cabellos rubios.  Tras un rato se levantan y se marchan. Yo tropiezo con el que estaba sentado en la esquina de la rinconera. Es muy alto. Me dice algo en su idioma, como si fuera yo quien tuviera que tener cuidado por donde ando, siendo aquella mi casa.

Ya solo, mi madre, desde la puerta de la cocina que da al salón me dice que sea educado y que la ayude a recoger.  Sobre la mesa están los vasos de las consunciones y los platos de los aperitivos. Me agacho y miro debajo del sofá de izquierda a derecha hasta la parte de la rinconera. No continuo.Veo lo que al principio parecen ser unas monedas que brillan, pero son piezas ovaladas en oro y plata. Son muy brillantes, resplandecientes, gruesas y bonitas. Ocupan mucho en mi mano izquierda. Las reliquias abultan mucho pero los motivos son muy simples aunque evidentemente no los se descifrar. Cojo en total al menos dos grandes y otra pequeña que me guardo en el bolsillo derecho. Tengo la convicción de que son como talismanes antiguos, muy antiguos y valiosos que me pueden llevar, si los se descifrar, a donde yo quiera. Una voz me dice que los guarde y los devuelva para cuando quien los perdió regrese. Digo que si a la voz, pero me los guardo sabiendo que no los devolveré. Son míos. De alguna manera se que fui yo quien los perdió.

                

Soy adulto. He estado visitando algún grandioso monumento por dentro, algo así como un templo antiguo, muy antiguo. Estaba oscuro y había un gran misterio que no había logrado nadie desvelar hasta el momento por mucho que fuera visitado por otros. Los pasillos eran largos,bellos, con una decoración muy rica.

De pronto me encuentro en el exterior.Es de día, con un cielo despejado de un bello color azul y me encuentro en los jardines adyacentes con una exuberante vegetación.De pronto me doy cuenta de que los amuletos tienen la respuesta:"desde dentro a fuera no se puede ver la pista; desde fuera a adentro sí". Miro uno de los talismanes brillantes y me doy cuenta de que a nadie se le había ocurrido hasta el momento ver las cosas así. Los símbolos cobran sentido para mi. Veo desde donde estoy una de las entradas al templo y desde ahí vuelvo la cabeza. Solo desde ese punto se puede ver de fuera a dentro una escultura semienterrada de la que sobresale solo la cabeza. Si mirara de dentro a fuera del templo no se vería. Mirando a través de la cabeza de la escultura se ve a donde tendría que ir como si de un plano tridimensional se tratara. Es el ojo izquierdo en que me da la información  Solo desde ese punto se ven las cosas que no se ven desde otro sitio y es como si viera el interior del templo donde está oculto lo que muchos han buscado y solo yo he encontrado. Hay que ver en ocasiones con distanciamiento. Estoy satisfecho, alegre y lleno de deseos de explorar.